LUGARES PARA SOÑAR

LUGARES PARA SOÑAR
cerrar lo ojos y sentir

jueves, 7 de marzo de 2013

EL CHAVISMO DESPUÉS DE CHAVEZ

Pocos personajes públicos han hecho correr tantos ríos de tinta como el sin par Chavez. La historia da, de cuando en cuando, con personas como él, capaces de aglutinar en una misma persona tantas luces como sombras. América Latina es muy dada a que afloren en su universo político personas capaces de levantar pasiones e iras en la mis proporción. Aparecen generalmente en nichos sociales diferenciados y como respuesta a periodos largos de incertidumbre política, social o económica. Si uno echa la vista atrás a América en los últimos treinta años se dará cuenta de que casi todo el cono sur ha sufrido una transformación tremenda. Pasó de años de duras dictaduras, auspiciadas casi todas por Estados Unidos, a periodos de caudillos emergentes. La deriva hacia la izquierda en la parte sur de del continente americano obedece a la lógica, sin entrar en un análisis mucho más profundo. Hablamos de países donde las élites minoritarias sometieron si miramientos a la mayoría pobre en momentos donde el apoyo del gigante americano se antojaba trascendental. La caída, por sus propios desméritos, de las marionetas que gobernaban los diferentes países llevó al poder a personas como Chávez. Chávez represente al tan mentado “populismo”, una forma peyorativa de llamarle a la política que trata de acercar a los pobres a su vera. Siempre ha habido populismo, lo que sucede es que antes era un populismo de clase. Los políticos buscaban en las clases medias su nicho de votos a sabiendas de que las clases menos favorecidas rara vez acudirían a votar. Hasta que, en un momento dado, decidieron hacerlo y dar su voto a quien ofrecía mejorar sus condiciones de vida. Las minorías, cuando se habla de américa latina, suelen ser al final enormes mayorías. Chavez, según todos los datos internacionales, redujo la pobreza en Venezuela del 46% a menos de un 25%, todo ello en 14 años, lo que explica el apoyo que ha tenido entre la mayoría desfavorecida. Puso en el escaparate a una importante masa de población que había permanecido oculta por las clases poderosas de Venezuela, también por la clase media. Nadie puede dudar de que el efecto cascada que surgió desde Chavez es un hecho. Ecuador, Nicaragua, Brasil, Argentina, Bolivia...son países que se vieron arrastrados a llevar a cabo “políticas populistas”; pero, a fin de cuentas, políticas que favorecían a los más desfavorecidos. En todos estos casos, salvo contadas excepciones, hablamos de naciones con ingentes recursos energéticos y minerales. Una riqueza de la que buena parte de su población apenas podía disfrutar no hace mucho. El chavismo, como cualquier poder que busca eternizarse o se alarga en demasía en el tiempo, corre el riesgo de entrar en derivas peligrosas, donde las libertades se suspenden a capricho y dónde o se está con el que manda o se está en contra. A Chávez está claro que le superó su cargo y el poder se le subió a la cabeza. Felipe González hablaba de la “erótica del poder” hace muchos años. El carisma de un líder logra que quienes le rodean apenas sean capaces de percibir sus defectos y si lo hacen, tratan de minimizarlos. Al chavismo le pasará como al “Felipismo” en España, que se terminará al poco tiempo de la desaparición, real o pública, de quien abandera el movimiento. Así pues creo que a Chávez se le utilizará en primera instancia como muñeco de pim pam pum y, con el paso del tiempo, se le valorará en su justa medida. Tal y cómo ha sucedido siempre. Mi opinión personal es que el cambio social que se ha dado en américa latina desde hace unos años es totalmente irreversible. El ser humano no se desprende fácilmente de los logros alcanzados si éstos merecen la pena.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

La opinión siempre es libre