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sábado, 30 de octubre de 2010

¿SE ESTÁ CONVIRTIENDO NUESTRA SOCIEDAD EN CAINITA?

Los Cainitas en el siglo II veneraron a todos aquellos que estaban contra el poder espiritual. Apreciaban la fortaleza y se mostraban contrarios a la debilidad humana. Creían que los llamados “pecadores” debían ser los beneficiarios últimos de su admiración. No tuvieron muchos adeptos, es cierto, pero su legado, su manera de entender la vida ha tenido continuidad hasta nuestros días.
Obviamente hoy día nadie se denominará a sí mismo como cainita, si acaso por su desconocimiento del término. Mas no es menos cierto que muchos se comportan de la misma manera salvando los casi diecinueve siglos de diferencia.
En nuestras sociedad de lleva a la cúspide a quien es rechazado por las mayorías, a quien representa el poder por la fuerza o la fuerza del poder.
Pese a estar en un momento histórico, hablando exclusivamente del mundo desarrollado, en el que la comunicación es fácil, donde el diálogo debería ser la forma de llegar a consensos…la realidad es que todos somos cainitas, nos revelamos contra el poder establecido simplemente por el hecho de revelarnos.
No digo que no sea necesario revolucionar a la sociedad de cuando en cuando, pero no es necesario hacerlo de manera continua.
Para avanzar es necesario que un grupo numeroso de personas remen en la misma dirección, se precisa de la consistencia de un grupo que busque el progreso social en contra de los “disidentes” que hacen de la rebelión contra todo su modo de vida.
Quizá no vivamos un momento de agitación social como debería de verse habida cuenta de la situación económico – laboral que vivimos. El gran problema de las sociedades de bienestar es que les cuesta reconocer que su preciado modo de vida se puede derrumbar.
Y son las personas con una mentalidad cainita, los que se haciendo pequeñas fracturas sociales, situándose siempre del lado del vencedor, ofuscando al vencido, separando en lugar de unir… y este tipo de persona abunda en todos los sectores sociales: desde la fe hasta la política.

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